En la ciudad italiana de Turín ha comenzado el juicio por la muerte de siete obreros ocurrida el pasado diciembre como consecuencia de un accidente en un acería. El desgraciado episodio se produjo a raíz del desborde de un depósito de aceite que se utilizaba para enfriar las láminas de acero. Los imputados por el caso son el consejero delegado de Thyssen Krupp  en Italia, los miembros del consejo de administración y el director de las instalaciones turinesas. Resulta importante resaltar, que los familiares de las víctimas no se presentaran como parte civil luego de que llegaran a un acuerdo con la empresa Thyssen Krupp. Trascendió que la compañía les pagará casi 13 millones de euros por no presentarse en el proceso como parte civil. Entre las principales pruebas que presentará la fiscalía contra la empresa, se destacan los informes emitidos por las compañías aseguradoras, quienes solicitaban medidas contra incendios en la planta. Por  otro lado, el sindicato que agrupa a los trabajadores de esa categoría, la Federación Italiana de Obreros, quiere presentarse como parte civil en nombre de todos los obreros italianos. Para lograrlo, se encuentra realizando una protesta en la entrada del tribunal.